La espirulina es un alga unicelular, de color azul verdoso, que se reproduce en zonas desérticas, sobre todo, en aquellos lugares en los que el agua es alcalina. Tiene forma de espiral, de ahí su nombre. Es uno de los complementos alimenticios más populares de los últimos años. Dentro de sus componentes se encuentra la clorofila, la que le da el color verde, y ficocianina, que le da el pigmento azul.
La espirulina, considerada en la actualizada como un “Superalimento”, principalmente se consume a modo de suplemento alimentario, ya que aporta una gran cantidad de vitaminas y minerales esenciales para el organismo.
Esta se hizo mundialmente conocida por haber sido utilizada en la NASA, en misiones espaciales como suplemento alimenticio para los astronautas.
Beneficios de la Espirulina
Los principales beneficios de la espirulina son las proteínas que aporta, hasta un 65 por ciento, así como los ácidos grasos y poliinsaturados, y minerales como potasio, calcio, magnesio, zinc, hierro, fósforo y selenio.
La espirulina también es una buena fuente de vitaminas como la E y la B, aunque no vitamina B12, tiene propiedades antioxidantes y ayuda a reducir el colesterol. Además, es de fácil digestión, por lo que incluso las personas con problemas de absorción intestinal pueden tomarla. Esta super alga ayuda a personas que sufren de enfermedades como la anemia o que estén bajos en minerales. Levanta el ánimo, mejora la condición física, aporta energía, vitalidad y ayuda a desintoxicar el organismo.
Su ingesta contribuye a combatir la fatiga mental y el cansancio, gracias a la cantidad de minerales, oligoelementos y vitaminas que aporta. Asimismo, facilita una correcta limpieza del organismo, puesto que ayuda a los riñones y al hígado a un adecuado funcionamiento para la eliminación de toxinas. Su concentración de hierro también la convierte adecuada para personas en estados anémicos y aquellas otras que quieran controlar su peso.
Por último, la espirulina resulta una aliada de los deportistas, pues incrementa su resistencia y rendimiento deportivo, además de reducir calambres y contribuir a la recuperación muscular.
Beneficios para el cuerpo:
. Ayuda al sistema inmune ya que tiene factores antiinflamatorios, anti virales y antioxidantes
. Ayuda al sistema nervioso ya que contribuye a la producción de acetilcolina
. Cumple tareas similares a la hemoglobina ya que es antiatómica
. Estimula el tránsito intestinal
. Ayuda a suprimir el apetito ya que contiene fenilalanina
. Ayuda a reducir el colesterol por sus beneficios cardiovasculares.
Contraindicaciones y efectos secundarios
Hay que personas que no deben consumir espirulina por más que se hable de sus beneficios. Entre ellas se encuentran las mujeres embarazadas, los niños lactantes, las personas con fenilcetonuria y aquellas enfermas de hiperuricemia, enfermedades del hígado, hipertiroidismo, fenilcetonuria, o bien algunas enfermedades del hígado y patologías autoinmunes.
Y es que en todo caso hay que tener en cuenta que la espirulina provoca un efecto anticoagulante, por lo que todo aquel que padezca algún tipo de trastorno hemorrágico debe evitar su consumo, así como quienes estén medicados por patologías como ictus o fibrilación.
Por lo que respecta a los alérgicos, estos deben tener especial cuidado, pues es habitual que provoque reacciones adversas. Como para detectarlo es necesario exponerse a ella, se recomienda que sean extremadamente cuidadosos aquellos que ya padecen cualquier tipo de alergia alimentaria.
Algunas contraindicaciones:
. Inflamación
. Erupciones cutáneas
. Mareos
. Sed descontrolada
. Dolor de estómago
. Estreñimiento
Cómo consumirla
Las formas más frecuentes con las que se emplea la espirulina son en formato de comprimidos, tabletas o en polvo, así que la encontrarás a la venta granulada y en pastillas. Las cápsulas o tabletas se toman como un suplemento dietético tradicional, mientras que en polvo puede ser añadida a ensaladas, sopas y salteados. Incluso puede mezclarse en bebidas.
En internet encontrarás numerosas recetas para incluirla en ellas. La clorofila que contiene, que le aporta ese color tan característico, también contribuirá a dar un tono vivo a esos platos en los que se utiliza.
Para el caso de que vayas a comprar productos bio enriquecidos con espirulina, fíjate en su etiquetado para comprobar la cantidad que contienen y recuerda todas las precauciones anteriores, puesto que no existe diferencia si la consumes de una forma u otra.
Y, por último, recuerda que la dosis habitual es de es de 3 a 5 gramos por día para una persona adulta. No obstante, antes de incluir la espirulina en tu dieta consulta con tu médico de cabecera o nutricionista.